Recorro como pulga
la espalda de este
camello
enorme y calentito
y me deslizo veloz
- cabeza primero-
en adrenalina de latidos
en chillidos de infancia
como navegando
en la panza
de un gigantesco y nómada
castillo de arena
enorme y calentito
y me deslizo veloz
- cabeza primero-
en adrenalina de latidos
en chillidos de infancia
como navegando
en la panza
de un gigantesco y nómada
castillo de arena
Eso tiene la poesía. Con palabras aparentemente sencillas, te transporta a lugares y situaciones insospechadas. Fíjemonos en el ritmo de este poema, es como cabalgar por el desierto a lomos de un camello o escondidos en el vientre de la infáncia.
ResponElimina